El condiloma Acuminata, también conocido como verrugas genitales, es una enfermedad de transmisión sexual causada por el virus del papiloma humano (VPH). El VPH es muy común: se estima que casi tres cuartas partes de los adultos tienen una cepa de VPH. Sin embargo, la mayoría de las personas con VPH nunca desarrollarán verrugas, y solo unas pocas cepas se asocian con complicaciones más graves que las verrugas.
la verruga es una proliferación anormal de células infectadas por virus. La mayoría tiene una superficie de "coliflor" rugosa distintiva. Normalmente son indoloras a menos que se irriten por la fricción de la ropa o las relaciones sexuales. Las verrugas causadas por el VPH se pueden ver en el pene y la vagina, pero también se observan comúnmente en el escroto y el ano. Tener muchas verrugas alrededor del ano puede provocar dificultades con la defecación.
El VPH causa verrugas porque absorbe muchos aspectos del metabolismo de la célula y conduce a una reproducción y fusión aberrantes de las células. En muchos casos, estos crecimientos son benignos y autolimitados, lo que significa que el sistema inmunitario del cuerpo erradicará la infección sin intervención médica. Sin embargo, este proceso puede tomar años, y algunas verrugas (especialmente las causadas por las cepas del VPH 6,11,16 y 18) eventualmente pueden convertirse en carcinoma de células escamosas. Este proceso es la principal causa de cáncer de cuello uterino en las mujeres. Afortunadamente, se ha creado una vacuna que, cuando se administra a una edad temprana, puede proteger a mujeres y hombres de estas formas potencialmente malignas de VPH. De hecho, el VPH es el motivo por el que las mujeres reciben frotis de PAP anuales: esta prueba se usa para encontrar cambios asociados con el VPH, de modo que el cáncer de cuello uterino se pueda detectar y tratar temprano. La vacuna Gardasil y los frotis anuales de PAP han salvado miles de vidas.
El tratamiento de las verrugas existentes es posible y generalmente es exitoso, pero puede ser difícil. Hay una multitud de opciones de tratamiento basadas en una serie de variables que incluyen el número, el tamaño y la ubicación de las verrugas y otros factores, como las preferencias del paciente. Algunas modalidades de tratamiento comunes incluyen la eliminación mecánica de la verruga utilizando técnicas limpias, el uso de nitrógeno líquido para congelarlo, el uso de una corriente eléctrica para quemarlo, el uso de preparaciones tópicas para disolver la verruga y el uso de sustancias químicas que regulan el sistema inmunitario localmente para acelerar el ataque natural del cuerpo sobre las células infectadas.
Desafortunadamente, ninguno de estos tratamientos es 100% efectivo cada vez y muchas verrugas volverán a aparecer después del tratamiento. Además, la mayoría de los pacientes con VPH son infecciosos incluso sin verrugas visibles. La mejor manera de "tratar" las verrugas genitales es evitarlas en primer lugar. Practique prácticas de sexo seguro, limite su número de parejas sexuales y use condones. Haga una cita con su dermatólogo si tiene una verruga genital para evaluación y tratamiento.
